El objetivo es recabar esta experiencia que ha dado buenos resultados a nivel nacional.
Janaina Rosa, coordinadora de Alimentos del Ministerio de Desarrollo Social de Brasil, señaló que a través del programa de adquisiciones del Gobierno se ha logrado que se establezca una estructura de comercialización adecuada con los campesinos y así mejorar su nivel de vida económica y social.
El Gobierno compra una buena parte de la producción de estos centros de acopio en aproximadamente el 50% y el resto a supermercados.
La funcionaria refirió que la agricultura familiar en Brasil tiene un gran potencial. “Hoy representa el 70% de la producción para el consumo alimentario del país”.
El proyecto en sus inicios se enfocó en una política para combatir el hambre, pero luego se convirtió en una herramienta para incrementar las rentas de las familias que se dedican a la agricultura familiar.
“Esta experiencia es fructífera que puede servir a Ecuador”, consideró Rosa.
Igual criterio comparte Maurillo Cesar, líder de la cooperativa. Mientras recorre el centro de acopio indica que aquí laboran 55 personas que comercializan alrededor de 40 productos, entre zanahorias, camotes, pepinillos y aguacates.
Cree que esta actividad económica ha contribuido a que muchas familias se liberen de la pobreza. Animado, señala que es alentador que el Gobierno ecuatoriano se interese por este plan que ha dado resultados positivos en su tierra.
En Brasil hay más de dos mil cooperativas y asociaciones que trabajan a través de compras gubernamentales.
Desde que se inició este programa de alimentos, en el año 2003, más de 300 mil familias han sido beneficiadas
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